El Taekwondo es un arte marcial de origen coreano y es descrita por quienes la practican como algo más que una forma de defensa personal. Esto porque es una disciplina que promueve el desarrollo físico, mental y espiritual de quienes lo practican.

En el ámbito físico el Taekwondo es una excelente manera de mejorar la condición física, desarrollar fuerza, flexibilidad, resistencia y coordinación.

En cuanto a la disciplina y el autocontrol, la práctica del Taekwondo fomenta ambos, además del  respeto hacia los demás, promoviendo valores fundamentales para la convivencia pacífica y el crecimiento personal.

Junto con lo anterior, permite a quienes lo practican incrementar sus  niveles de habilidad, ganar confianza en sí mismos y desarrollar una mayor autoestima.

Esto ayuda también a disminuir los niveles de estrés, mejorar la concentración y promover un estado de bienestar mental y emocional.

Además de ser una forma de autodefensa efectiva, a través de técnicas de patadas, golpes y bloqueos, que pueden ser útiles en situaciones reales.

Finalmente, no hay que olvidar que el Taekwondo ofrece la oportunidad de participar en competiciones locales, nacionales e internacionales, donde se puede poner a prueba el progreso y compartir experiencias con otros deportistas de la disciplina.